La etiqueta energética que acompaña a todos los acondicionadores es una garantía y un punto de referencia de todos los productos Olimpia Splendid. A finales de 2004 entró en vigor la obligación del etiquetado energético también para los acondicionadores, y con éste se puede entender mejor la eficiencia de los mismos, pero sobre todo se pueden comparar las prestaciones de los modelos de marcas diferentes. La clase mejor es la clase A, y así sucesivamente las otras hasta la D. El Reglamento Delegado (UE) 626/2011, en vigor desde el 1 de enero de 2013, ha aportado algunas importantes modificaciones. En concreto, determina que la eficiencia energética debe ser calculada en base a la temperatura exterior del lugar en EL que se encuentra el edificio a refrigerar (EER y COP estacionales: SEER y SCOP) y obliga a incluir la potencia acústica máxima interior y exterior.
